Titulo: Mi sueño, tú.
La otra noche soñaba y por soñar, soñé que tú conmigo escapabas que yo contigo escapé. Que nos recorríamos los mundos viajando como las estrellas viviendo los dos juntos siendo libres, como ellas. Que nos íbamos de gira por tu vida y por la mía que nunca había prisa más que la tuya y la mía. Que el tiempo no lo dictaba el reloj sólo el ritmo de tu corazón que no había noche ni día sino lo que tú decías. Que no había lunes ni tampoco martes todo días para besarte toda la vida para amarte. Que ganamos a nuestro miedo ese miedo a conocernos a decir lo que queremos a decir; te quiero. Y al despertar todo acabo creí que todo era fantasía sólo cosas mías. | Pero algo se mantenía algo en mi corazón ese algo es mi vida ese algo es nuestro amor difícil donde los haya pero sin duda el mejor. Seguro que con el tiempo y con mucho de ese amor conseguiremos algún día hacer realidad esta poesía hacer culminar este amor. Cuando llegue ese momento y seguro que lo hará nos leeremos el pensamiento nos pondremos a recordar nos reiremos de esos momentos en que no sabíamos como actuar. Y... por fin llegó ese día, ese día al fin llego no hubo palabras, no hubo miedo no hubo síes, no hubo noes era todo sentimiento, era todo nuestro amor. No tuvimos que pedirlo nos miramos con deseo leímos nuestro pensamiento y nos dimos nuestro amor era el tuyo, era el mio, era el de los dos. A la mañana siguiente desperté creyendo que lo soñé estuve todo el día sin acabarlo de creer pero por la tarde, al verte, lo sabia era tuyo... y tú, mía. |
Un saludo.
Fdo. Conejo Blanco. O
El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona.
Aristóteles. 384 AC-322 AC. Filósofo griego.
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